Es una tendencia creciente, nueva, que combina dos estilos, como su propio nombre indica, la fusión del estilo japonés y el estilo escandinavo. Se trata de crear una atmósfera con interiores limpios y minimalistas pero cálidos y acogedores al mismo tiempo. Hay quien defiende que más que un estilo interior Japandi sería una filosofía. De hecho en este estilo se unen el minimalismo escandinavo con el espíritu japonés "wabi sabi" que curiosamente encuentra la perfección en la imperfección. Esto se consigue gracias a la belleza de la artesanía y de la decoración tradicional, la fusión de materias primas y elementos naturales.
También se consideran unos de los mejores ejemplos de fusión de dos estilos de inspiración étnica, ya que las dos tienen mucho en común. Este estilo está en contraposición de otros estilos en los que predomina la decoración intensa y el uso del color, primando aquí la simplicidad, la ligereza y la funcionalidad. Usaríamos una paleta de colores cálidos y neutros en la decoración con este estilo, predominando los colores naturales en las maderas, y los linos y grises en las telas, cristales traslúcidos también y mucho blanco y nada de brillo.