Es objeto de debate y da para escribir varios tomos la opción de restaurar un mueble o transformarlo. Lógicamente son opciones completamente diferentes. En cuanto a la restauración si hacemos caso de los más puristas restauradores, habría que mantener unas condiciones y cumplir una normas para respetar el concepto original del mueble, así como sus materiales, incluso su pátina original a ser posible que es la que en el caso de muebles de alta época le da el valor. 

Por otro lado tenemos la opción de transformarlo. Puede parecer quizás más divertido y efectista. En este caso nos olvidamos del valor de la pieza, nos olvidamos de su concepto y de su estado original cuando fue fabricado. Utilizamos el soporte que heredamos como forma geométrica para proyectar sobre el mismo una nueva aventura estética. Aquí si el mueble era en madera de nogal o caoba con acabado tradicional damos paso a acabados bicolores, tricolores o lo que nos imaginemos. Utilizamos plata, oro, colores, multicolores, pátinas, y en definitiva creamos una pieza completamente nueva.